En siete días, Jet Mason estará muerta.

Jet, hija de una de las familias más ricas de Woodstock, Vermont, tiene 27 años y aun espera que su vida comience. Lo haré después, dice siempre. Cree que tiene tiempo.

Hasta la noche de Halloween, cuando es brutalmente atacada por un intruso invisible.

El golpe le provoca una lesión cerebral catastrófica. La doctora está seguro: en menos de una semana, la herida detonará un aneurisma mortal.

Jet nunca se consideró alguien con enemigos. Pero ahora observa a todos con otros ojos: a su familia, a su ex mejor amiga convertida en cuñada, a su antiguo novio.

Le quedan como máximo siete días, y mientras su condición empeora, solo cuenta con Billy, su amigo de la infancia. Aun así, está decidida a terminar algo por primera vez:

Jet resolverá su propio asesinato.