Toby 

Conocía a Nora Jackson desde que éramos dos niños pequeños revoltosos corriendo entre los aspersores en la granja de mi abuelo. 

Pero a medida que crecimos, cuando mis sentimientos por ella cambiaron, me di cuenta de algo. Ella era mía.

Nora era descarada y tenía un toque de terquedad, pero no había nada

que me excitara más.

Ahora era toda una mujer, inocente, hermosa, y dulce como las manzanas acarameladas que vendían en la feria cada verano. Y se me hacía agua la boca cada vez que la veía. Puede que sea mi amiga de la infancia, pero es hora de que le diga cuánto significa para mí.

Es hora de que le demuestre a Nora que estábamos destinados a estar juntos desde el primer día.

Nora 

Toby Maxwell no era solo mi amigo; era el hombre del que me había enamorado perdidamente. 

Con una gran hebilla de cinturón, botas vaqueras lustradas y espuelas de plata, lo conocía de toda la vida y lo había amado durante el mismo tiempo.

Ahora que soy adulta, entiendo que reprimir mis sentimientos fue una tontería. La vida es demasiado corta para preocuparse por los “qué pasaría

si”.

Es hora de cruzar la línea y decirle a Toby lo que realmente siento.