Enamorarme del atractivo y gruñón dueño de la tienda de cebos local no formaba parte de mi plan de venganza cuando decidí superar a mi ex...

Aspen

Mis altísimas expectativas para nuestras vacaciones familiares anuales en Maine se evaporan más rápido que el chorro de una moto acuática cuando descubro que el nuevo novio de mi prima es el mismo chico que me rompió el corazón públicamente las pasadas Navidades. ¿Cómo se supone que voy a disfrutar de mis vacaciones con él en nuestra cabaña junto al lago como si fuera un maravilloso miembro de nuestra familia?

Se acabaron mis planes de verano sin hombres y sin dramas.

Decidida a vengarme, le ruego al dueño de la tienda de cebos local que me deje apuntarme a clases de pesca, a pesar de que están reservadas exclusivamente a jubilados. Prefiero pasar mis vacaciones con un grupo de ancianos locos por los cebos que junto al lago con mi ex idiota y sus estúpidos comentarios sobre mi falta de conocimientos de pesca y navegación.

Pero cuanto mejor pesco, más problemas tengo.

Porque enamorarme del atractivo y gruñón dueño de la tienda de cebos no formaba parte de mi plan de venganza...

Enamorarme de mi prometida falsa no formaba parte del plan.

Claro que tampoco lo era la rodilla rota que acabó con mi carrera de hockey. En un momento, lo tenía todo: fans que me adoraban, millones en patrocinios y una novia estrella del pop que ansiaba ser el centro de atención incluso más que yo. Al minuto siguiente, todo se había esfumado.

Sin querer nada más que me dejaran solo para lamerme las heridas, compré un faro en ruinas en mi ciudad natal, Fog Harbor, Maine. El faro no solo ofrece el aislamiento y la soledad que deseo, sino que restaurarlo a su antigua gloria me dará algo que hacer. Contrato a una empresa contratista local, Corbin and Sons, para que me ayude con el trabajo. Pero cuando aparece el contratista, me sorprende descubrir que no es ni Corbin ni uno de sus hijos; es una de sus hijas.

Charley Corbin y yo tenemos una historia. En la secundaria, era la mejor amiga de mi hermana y mi enemiga mortal. Ahora, ella ha crecido, es hábil con una sierra eléctrica, ingeniosa y guapísima.

Desafortunadamente, Charley se aferró a su rencor con puño de hierro. No ayuda cuando un paparazzi toma fotos engañosas de nosotros juntos. Antes de que nos demos cuenta, todo el mundo piensa que Charley es mi prometida. Vislumbro la vida que podría tener con ella en Maine, y la quiero. Más que al hockey. Más que a mi vida anterior. Más que a cualquier otra cosa.

Fingir un compromiso con mi enemigo suena a la peor idea, pero ¿enamorarse de él? Eso sí que sería un crimen.

Benson Donovan ha sido mi némesis desde que abrí un resort de glamping junto a su camping básico. Según él, el glamping no tiene nada que ver con el “camping de verdad” y nunca deja pasar la oportunidad de decírmelo.

Cuando se pone a la venta un codiciado terreno junto a nuestro campamento, ambos lo queremos, pero ninguno puede permitírselo. Mi madre se ofrece a ayudar, con una condición: si me caso con Benson, comprará el terreno como regalo de bodas.

Sí, un pequeño detalle: le dije que estábamos saliendo para esquivar su incesante búsqueda de pareja.

Ahora tengo que convencer a Benson de que necesitamos una relación falsa, por mucho que lo odie. Pero cuanto más tiempo pasamos juntos, más tengo que convencerme de que no estoy en absoluto enamorada de Benson Donovan. Al fin y al cabo, solo estamos fingiendo...

El mejor amigo de mi hermano y yo hicimos una promesa de matrimonio en la secundaria. La fecha límite “mi trigésimo cumpleaños” es la semana que viene. ¿Vendrá por él?