El hermano de mi mejor amiga.

Mi atormentador.

Mi persona menos favorita.

Un drogadicto. Delincuente.

Un perdedor descuidado y sin rumbo.

Eso es lo que solía creer, pero no lo conocía realmente.

Y cuando finalmente lo vi, fue lo mejor y lo peor que pasó.

Ardimos con calor y rapidez.

Pasión. Ira. Amor. Dolor.

Fuimos imprudentes. Ingenuos.

Estábamos condenados desde el principio.

Cuando finalmente vi a Macon Davis por lo que era, ambos caímos en las llamas.

     

Lennon Washington ha sido la estrella de cada sueño, de cada pesadilla, desde el día en que la perdí.

    

Desde el momento en que dejé que mis demonios ganaran, y ella se escurrió entre mis dedos.

    

Su recuerdo me persiguió.

Me cambió.

Me rompió y reconstruyó.

Y casi había renunciado a lo nuestro.

    

Ahora la tragedia la trajo de vuelta a mi vida.

Mis secretos están a su disposición. 

Los suyos se están desentrañando rápidamente,

Y cada emoción que tratamos de negar está regresando con una venganza.

    

Pero ya no somos niños.

Cambiamos drásticamente.

Y con cada nuevo dolor, empiezo a preguntarme...

    

¿Hay un lugar para nosotros en esta vida, ¿O tendremos que volver a intentarlo en la siguiente?

Pero yo quiero el desastre que esconde debajo.

Samantha Harper es intocable.

Ella es lo más cercano que tenemos a la realeza en mi pequeño pueblo.

Hija de un senador.

Más rica que el pecado.

Con clase, elegante y fría como el hielo.

Ella es mi polo opuesto.

Y desafortunadamente,

Ella es exactamente mi tipo.

Lástima que la realeza no confraternice con campesinos.

Hasta que una noche, Samantha Harper se encuentra a mi merced, y la tentación de ensuciar su impecable fachada es demasiado grande.

Cuando su máscara perfecta se resbala, no es una princesa de hielo lo que encuentro debajo, sino una guerrera en su armadura de guerra.

Una serpiente vestida de reina.

Todo lo que se necesita es una noche, y estoy decidido.

Ella nunca tendrá que luchar otra batalla sola.